Debate Minero-Energético
martes, 18 de enero de 2011
Centralización vs Descentralización: el falso debate de la lucha contra la corrupción en la gestión de las regalías
Pero más allá de estos argumentos a favor de que una parte de las rentas sea asignada a las regiones productoras, me parece importante resaltar que la transparencia y eficiencia del sector no están necesariamente asociadas a su centralización o descentralización. Ni un manejo más centralizado es garantía de transparencia, como lo demuestra el caso mexicano, ni un sistema descentralizado es garantía de uso adecuado de los recursos o de equilibrio en su distribución, como lo demuestran los problemas de ejecución de los gobiernos locales peruanos, los escándalos de corrupción en Colombia y las desigualdades inter-regionales en Bolivia y Nigeria. Para promover la transparencia y el uso eficiente de las rentas extractivas es importante combinar mecanismos centralizados que permitan manejar la volatilidad del sector, con una distribución equitativa (entre quienes más lo necesitan por sus condiciones demográficas y de pobreza) y justa (entre quienes reciben las externalidades negativas directas del sector) de dichas rentas en el nivel local. Pero es fundamental que dichos mecanismos estén institucionalizados, para que los ingresos de la industria extractiva no estén sujetos permanentemente a negociaciones políticas, ni se conviertan en la caja menor con la que el ejecutivo central compra apoyos regionales o en el caballo de batalla de políticos regionales de visión rentista. Adicionalmente, la publicación de información, así como el fortalecimiento de los sistemas de control, tanto en el nivel central como en el local es esencial.
lunes, 3 de enero de 2011
Políticas gubernamentales y no de Estado: el debate sobre la renta extractiva en América Latina
El tema petrolero o minero está así rodeado de mitos extremistas. Para unos se trata de incrementar a como de lugar la participación del Estado, lo que es sin duda un objetivo justo, siempre y cuando no se ponga en juego la sostenibilidad del sector. Si en el caso Venezolano y Mexicano, la participación estatal es significativa y permite financiar el gasto social, ideologizar el debate y llevar al extremo el manejo político y no técnico, puede llevar a las mismas empresas estatales a perder competitividad en el largo plazo como parecería suceder con PEMEX y PDVSA o incluso con PetroEcuador. La ausencia de un programa serio de inversiones y el bloqueo a la inversión privada, podría poner en juego el autoabastecimiento del país como sucede en el caso mexicano. Para otros, en el otro lado, se trata de acabar a como de lugar con la participación del Estado en el sector, percibida como fuente de corrupción e ineficiencia. No obstante, la privatización de las empresas estatales disminuye la posibilidad de que el Estado, y así la sociedad en general, se beneficie de la renta petrolera y minera. En efecto, como lo muestra el estudio de Campodónico para la CEPAL (2008), la presencia de una empresa estatal en Chile y su ausencia en Perú es la principal razón que explica la menor renta minera estatal en este último país. Pero adicionalmente, la privatización de las empresas estatales tampoco es garantía de mayores niveles de inversión, como lo demuestra el caso Argentino, donde el Estado ha perdido el control para incentivar el aumento de la reservas y las empresas privadas parecen tener otras prioridades de inversión en la región.
Aunque es difícil y hasta inconveniente pensar en un debate neutro, apolítico y desideologizado, si es fundamental poner todas las cartas sobre la mesa. Abrir el debate para que todos los actores puedan exponer sus puntos de vista y aunque no se logren consensos al menos se establezcan acuerdos que fortalezcan la posición y participación de los Estados, al tiempo que garantizan el desarrollo del sector y la rentabilidad de las empresas. No hay modelos, cada país debe encontrar su propio punto de equilibro. Los casos de Brasil o Chile podrían ser ejemplos interesantes, aunque con aproximaciones político-ideológicas diferentes. Al tiempo que se insertan en la globalización y se abren a capitales privados, fortalecen sus empresas estatales y las hacen competitivas, garantizando así una participación importante del Estado.
jueves, 18 de noviembre de 2010
Este blog...
La locomotora minero-energética se mueve en Colombia con pasos de gigante. Más de 70 bloques petroleros fueron entregados en concesión la semana pasada. El fantasma del desabastecimiento parece desaparecer pero el precio de la gasolina no baja. La minería también se mueve. Más de 5000 títulos mineros, algunos de los cuales están asignados en áreas de reserva natural según lo denunció el ministerio del medio ambiente hace algunos meses.
Sin menospreciar los importantes recursos que este sector puede generarle al país en términos de inversiones y de regalías, y porque es fundamental garantizar justamente que el desarrollo minero-energético se traduzca en desarrollo, este blog busca abrir el debate. Pero un debate amplio, que abarque la discusión, ahora en la agenda pública, sobre las regalías y sus destinatarios pero que promueva la reflexión global sobre el modelo de desarrollo que se promueve con la extracción de los recursos naturales, y el análisis detallado y caso por caso de los beneficios y externalidades que realmente trae esta actividad para los habitantes de un territorio.
Se busca entonces debatir sobre la generación, distribución y uso de la renta extractiva en perspectiva comparada con otros países de América Latina, pero también sobre los actores en le territorio, las empresas, el Estado en lo local, las ONG, las organizaciones comunitarias y los actores armados legales e ilegales, entre otros. Del debate sobre el uso de las regalías en Arauca podremos pasar a la discusión sobre el precio de la gasolina en Colombia, el más alto entre los países productores en el continente. Del debate sobre las grandes concesiones mineras y sus consecuencias ambientales -la tradicional explotación de carbón en el Cesar y en la Guajira pero también la explotación de oro a cielo abierto en el Tolima- podremos pasar a la discusión sobre la minería ilegal y sus efectos sobre el río Dagua en el Valle, en el Bajo Cauca o en el Chocó.
Es una invitación a quienes quieran, como yo, que se abra el debate.